HIDALGO, A 150 AÑOS

0
1995

Por Fernando Alfonso Ávila.

El miércoles 16 de enero de 2019, cuando se cumple un mes y medio de iniciada la administración del presidente número 79 de México, desde Guadalupe Victoria, Andrés Manuel López Obrador, mientras tienen lugar los primeros efectos de las medidas impulsadas por el gobierno de la denominada Cuarta Transformación del país, también se cumplen 150 años de la erección del Estado de Hidalgo, ocurrida durante el segundo mandato de Don Benito Juárez García, el presidente número 27 de México.

Su territorio de 20.8 mil kilómetros cuadrados, su población de 2.8 millones de habitantes, su gobierno y su economía, constituyen las principales estructuras que lo ubican como una de las entidades más pequeñas en el contexto nacional.

Sin embargo, sus dimensiones estadísticas no limitan los alcances de los personajes hidalguenses que han destacado en el panorama nacional y mundial, ni reducen el impacto de los hechos que aquí han tenido su origen o su desarrollo.

Hidalgo ha visto pasar una diversidad de hechos que nutren su historia. Llega a su primer siglo y medio de existencia con una diversidad de expresiones políticas convertidas en gobiernos municipales, así como en los poderes ejecutivo y legislativo del Estado.

Por vez primera en la historia de la vida democrática de la entidad, prácticamente todos los partidos políticos con registro legal ante la autoridad electoral tienen representantes en funciones de gobierno.

Nunca, como ahora, se había presentado una correlación de fuerzas tan equilibrada en el quehacer público, en cuya conformación hay que destacar siempre la apertura y flexibilidad de las partes que, sin renunciar a sus identidades ideológicas, han fincado acuerdos para la buena marcha de la entidad.

La inmediata alineación de la perspectiva gubernamental el mandatario hidalguense Omar Fayad Meneses a las directrices del gobierno federal entrante, ha cimentado la buena relación institucional que ya se refleja en acciones para hacer frente a los desafíos comunes, con resultados que benefician a la población abierta.

Basta comparar lo que en otras entidades tiene lugar, pues mientras los mandatarios no terminan por acomodarse ante las disposiciones del nuevo gobierno federal o viven sometidos a confrontaciones con sus congresos, aquí hay un poco más de sentido de colaboración conjunta.

Una de las muestras de mayor alcance en esta “transición de terciopelo” en Hidalgo ha sido el diseño, proyecto, análisis, las modificaciones y la aprobación del presupuesto de egresos para el ejercicio 2019 en la entidad.

Con 20 votos a favor, tres en contra y seis abstenciones, los diputados de la LXIV Legislatura del congreso del estado de Hidalgo, aprobaron el Presupuesto de Egresos del 2019 por 46 mil 271 millones 736 mil 283.66 pesos, así como las leyes de ingresos de los 84 municipios.

En una prolongada sesión, 24 horas antes de la fecha límite que la ley marca para el caso, los diputados locales de Morena, quienes afirman que en el presupuesto se dio prioridad a educación y salud, hicieron valer su mayoría al votar los 17 a favor, en un presupuesto que, de acuerdo con el presidente de la Junta de Gobierno del Congreso localRicardo Baptista, pusieron algunos candados para el manejo de los recursos públicos, en donde se disminuyó el gasto de publicidad para las dependencias.

El presupuesto enviado por el Poder Ejecutivo fue modificado por los diputados, para etiquetar recursos a ramos que, en opinión de los legisladores, son prioritarios.

Por ejemplo, se redireccionaron más de mil millones de pesos, de los cuales 300 millones se asignaron al sector del campo, luego de las protestas de organizaciones campesinas en demanda de más recursos.

De acuerdo con el documento, el gobierno estatal destinará 760 millones de pesos para pagar deuda pública el próximo año.

En cuanto las transferencias a municipios para proyectos de inversión tendrán un monto de 750 millones de pesos. El gasto en educación representa una erogación de las más significativas dentro del presupuesto, con 19 mil 178.1 millones de pesos.

Los municipios de Apan, Huasca, Nopala y Zapotlán tendrán que aplicar la ley de ingresos 2018 durante el próximo año, ya que sus cabildos aprobaron dichos documentos fuera de los plazos establecidos por la ley.

El gobierno municipal de Tula, uno de los tres municipios más importantes de la centenaria entidad hidalguense, ejercerá por su parte 325 millones 253 mil 141 pesos con 12 centavos (70 millones más de lo proyectado en el documento original, gracias a gestión de recursos extraordinarios).

Pero lo relevante no son los 311 millones que gastará el poder legislativo, o los 535 millones del poder judicial, ni los 120 millones del Instituto Estatal Electoral o los 47 millones de la Comisión de Derechos Humanos de Hidalgo, lo relevante es que en Hidalgo y en Tula, los gobiernos de extracción priista se adelantaron a sus tiempos y previeron condiciones para el actual escenario, que para otros fue inesperado, y tendieron puentes para que al menos bajo su mando, los 150 años de Hidalgo se celebren más o menos en paz.