
El Paquete Económico 2026 presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público al Congreso de la Unión propone una política económica centrada en el bienestar, salud, educación y vivienda social, además de impulsar la actividad productiva mediante inversión pública estratégica alineada al Plan México.
Se proyecta que la economía mexicana mantenga su resiliencia gracias al consumo interno, la inversión nacional y la posición estratégica en cadenas globales de valor, estimando un crecimiento económico real anual entre 1.8% y 2.8% para 2026.
El déficit público seguirá disminuyendo gradualmente, con una reducción acumulada de 1.6 puntos porcentuales del PIB respecto a 2024, lo que permitirá preservar el dinamismo económico y garantizar la sostenibilidad de la deuda pública, estimada en 52.3% del PIB al cierre del segundo año de la administración.
La recaudación tributaria alcanzará un máximo histórico de 15.1% del PIB en 2026, asegurando el financiamiento de los Programas para el Bienestar y proyectos de infraestructura de impacto nacional.
El Plan México será el eje para fortalecer el desarrollo industrial y regional, destinando el 2.5% del PIB a inversión física para potenciar las vocaciones productivas y ampliar la infraestructura logística.
Pese a desafíos globales, México cuenta con oportunidades para avanzar hacia un desarrollo equilibrado e incluyente, apoyado en el consumo privado, mayores salarios reales, incremento del empleo formal y fortalecimiento de programas sociales.
El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2026 garantiza recursos para proyectos de infraestructura que contribuyen al crecimiento económico y la reducción de desigualdades, así como un mayor despliegue de programas sociales que beneficiarán directamente al 82% de las familias mexicanas. Destaca la Pensión Mujeres Bienestar, que dará cobertura universal a mujeres de 60 a 64 años.
Se impulsarán obras estratégicas como trenes de pasajeros, nuevas carreteras, modernización de autopistas, proyectos hídricos y tecnificación del campo, además del desarrollo de los Polos del Bienestar para incentivar la inversión nacional e internacional.
La Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación busca fortalecer la eficiencia recaudatoria y ampliar la base de contribuyentes con criterios de equidad, apoyándose en herramientas digitales y el combate a la evasión fiscal, sin crear nuevos impuestos generales.
Se implementarán medidas fiscales en comercio exterior, como aranceles estratégicos a países sin acuerdos vigentes, y ajustes fiscales a bebidas azucaradas, tabaco, además de un impuesto especial a videojuegos con contenido violento, promoviendo así hábitos de consumo más saludables y una competencia más justa.
El Gobierno de México reafirma su compromiso con la solidez macroeconómica y la certidumbre para la población, mercados y comunidad internacional respecto al rumbo de la economía y las finanzas públicas en el mediano plazo.

