Ana Regina Muñoz Méndez de 11 años es una gimnasta rítmica y a pesar de su corta edad ya tiene mucho recorrido en esta disciplina, pues la practica desde los cinco años.
Está de regreso a Tula, después asistir al Segundo Campamento Élite de Gimnasia Rítmica realizado en el Centro Nacional de Alto Rendimiento (CNAR), organizado por la Dirección Técnica Nacional representada por la Maestra Laura Acosta, en la Ciudad de México el pasado fin de semana.
Regina compite de manera individual desde los ocho años.
En 2017 participó en el selectivo a Olimpiada Nacional y desde entonces ha estado entrenando y preparándose para participar no solo en copas a nivel nacional, sino para mejorar su posición en el ranqueo nacional de la Federación Mexicana de Gimnasia.
Actualmente se encuentra en el nivel 70 de 172 gimnastas en la clase III-A, siendo hasta 2019 la única gimnasta tulense en dicha clasificación.
El camino de Ana Regina aún es largo, pero tener un sueño y una meta ayuda a trazar estrategias; su entrenadora Verónica Espinoza, en conjunto con la maestra Catalina Salinas, así como con la Maestra Edna García Amor (Talento Olímpico Mexicano) establecen cargas de entrenamiento, rutinas de competencia, acondicionamiento y flexibilidad.
Su club ESGIM y su casa CDT RITMIKA, con la maestra Mirna Hormigo, le brindan cobijo deportivo y un equipo de amigas con quienes juega entrenado y entrena jugando; lo que muchas veces se piensa que las jóvenes atletas pierden en su infancia.
Gigi, como le llaman su familia y amigos, sabe que la escuela es importante también, así que debe hacer los espacios y tiempos necesarios para cumplir con sus tareas y proyectos escolares.
El Colegio América, el Profr. Gustavo Ramos y todos sus profesores han brindado los espacios necesarios para que ella pueda asistir a campamentos y competencias sin descuidar el sexto año de primaria que actualmente cursa.
Además de esto, la joven atleta cuenta con el apoyo profesional de todo un equipo multidisciplinario.
Complementa su entrenamiento con la práctica del ballet con la maestra Tania Altamira; cuenta con el apoyo de la psicóloga deportiva, la Dra. Martha Nieves, el Dr. Víctor Jiménez, nutriólogo del CNAR marca su alimentación.
Cuando hay lesiones propias de su entrenamiento es la Lic. Karina Díaz de Elika quien se encarga de dejarla como nueva.
Todos; cada quien en su rama, apoyan los aspectos necesarios para el buen desarrollo de un talento deportivo como lo es Ana Regina.
Todo esto no sería posible sin el invaluable apoyo, amor incondicional, porras y atención de toda su familia, sus padres y hermana han integrado un equipo de asistencia física, moral y económica indispensable para que ella pueda concentrarse en mejorar día con día. Una brillante trayectoria está por venir.