Mucho más allá de la lucha del poder por el poder que encabezan viejos lobos del mar de la política municipal, en cada uno de los 84 grandes hogares que conforman la entidad hidalguense brilla de manera genuina el deseo de la gente de bien para que todo marche mejor, rubro por rubro.
En este sentido, reflexionemos en como, pese a los tintes poco cordiales que se han generado en algunas contiendas, así como los ataques casi tradicionales en este tipo de procesos, prevalece en Hidalgo un ambiente de paz, generado sobre todo por las familias trabajadoras, que tendrán la decisión final el próximo 18 de octubre.
No todo ha sido malo en lo que hasta el momento hemos visto a casi una semana del arranque de las campañas; por el contrario, las condiciones que la actual pandemia ha impuesto, obligan a partidos políticos, integrantes y simpatizantes, a redoblar esfuerzos para estar a la altura de las exigencias actuales.
Comencemos por la utilización de medios digitales como una de las principales vías de contacto entre candidatos y votantes. Si bien la utilización de redes sociales servía hasta antes de esta contienda como un buen medio secundario, alternativo, complementario, hoy es básico y hasta una errónea administración de estos espacios podría dar varias derrotas. ¡El futuro ha llegado muy en serio!
Esta vez los institutos políticos no podrán “mostrar músculo” en actos multitudinarios, mítines con cientos de personas y derroche de dinero en templetes, sonido, lonas con mensajes de apoyo, renta de autobuses para el traslado de gente. Si bien ya se venían presentando ajustes para transparentar y regular recursos, la pandemia nos trajo este nuevo reto que consiste, más que una competencia de acarreados, en una competencia de inteligencia y buenas ideas para convencer.
Si un rubro de la población se siente cómodo con este tipo de campaña es el de los jóvenes y es por eso que hoy se observan más activos que nunca, lo cual representa avances que nos deben hacer sentir bien como sociedad. Si en algún momento este sector era el encargado de las porras, agitaba banderas y pegaba calcomanías, hoy representa la veta de la que emanan los titulares del área de marketing digital, imagen, logística, coordinan campañas completas y ¡hasta son candidatos!
Que nadie diga que todo lo que sucede en las campañas políticas es malo, vamos todos desde la trinchera que nos corresponde a apretar el acelerador para estar a la altura de nuestra actualidad, para intentar estar al ritmo de este tiempo vertiginoso y a la vez apasionante, que nos ha tocado compartir como vecinos de un estado con sed de bienestar.