La sociedad de la región Tula-Tepeji tiene en Reyna Dagda un nuevo perfil de humanismo y sentido del servicio, que ha concretado mediante el activismo en favor de los sectores sociales más vulnerables.
En exclusiva, esta luchadora social, esta “guerrera hidalguense”, nos permite charlar con ella y nos comparte reflexiones en sus propias palabras.
¿Quién es Reyna Dagda?
Hablar de mí misma es algo que me cuesta trabajo, pero si tuviera que definirme diría que soy una mujer comprometida con sus ideales, una mujer de lucha y entrega, alguien a quien le interesa apoyar a quien confía en ella; me defino como una guerrera.
¿Qué significa para ti la familia?
Para mí lo más importante es mi familia: antes, durante y después; mi familia es mi vida, mi refugio, mi paz, mi consuelo, mi alegría. Mi familia es mi motor; es mi base para seguir viva. En general, la familia es el núcleo más importante para impactar desde lo más pequeño a lo más grande que es la sociedad.
En casa, empresa y política es muy sencillo llevar un equilibrio porque somos uno solo, siempre deseándonos lo mejor para cada miembro de nuestra familia, somos empresarios porque creemos que esa es una manera importante de generar desarrollo, mi padre nos enseñó a ganarnos lo nuestro a base de trabajo, por eso vemos el activismo social y la política como una oportunidad de servir, de hacer y de realizar como una convicción, porque ningún miembro de mi familia, ni yo hemos vivido nunca de la política.
¿Cuál es la situación de las mujeres en la política?
En verdad esperanzadora, y a la vez retadora. Yo he vivido en carne propia la situación de las mujeres en la política, no sólo no somos tomadas en cuenta, sino que en algunas ocasiones son relegadas a una posición de espectadoras; pero con la situación social actual, viendo tantas mujeres haciendo historia, es inspirador lo que podemos hacer.
¿Qué estás haciendo para cambiar la realidad?
Mi lucha es diaria, es para cambiar las cosas respecto a que nos den mayores oportunidades.
Estoy convencida que sólo con resultado de trabajo diario les podremos demostrar que tenemos la capacidad para ser factores de cambio.
Es una lucha de mentalidad, podemos observar que en algunas regiones de Tepeji del Rio, de Tula, aún sigue habiendo mujeres que no pueden tomar una decisión si no la consultan con el esposo, y es algo en lo que se debe trabajar, decirles a las mujeres lo que valen, lo que representan para el entorno, e involucrarlas de manera más directa en la vida social de México.
En la Asociación Civil Realizando Deseos, que junto con amigas de la región hemos conformando, precisamente ese es el tema toral: la mujer, como sexo fuerte también; nos capacitamos, haciendo llegar a ellas información y gestionando para que busquen y encuentren mejores espacios de desarrollo.
Realizando Deseos es una asociación civil pensada para hacer realidad las aspiraciones sobre todo de las mujeres, es un sueño hecho realidad por lo que quiero que sea mi historia de vida.
Realizando Deseos es la suma a esfuerzos importantes por hacer cambios, teniendo ejemplo a un amigo preciado y quien yo considero uno de los mejores gobernadores de Hidalgo, que más ha hecho, y de quien estoy segura de que hará más, Omar Fayad Meneses.
“La vida me ha enseñado a vivir mi hoy como si fuese el último día de mi vida, soy una mujer decidida a vivir todo lo que la vida me da; soy, primero que nada, una mujer de Fe y eso es lo que me hace ser feliz todos los días porque me levanto dando gracias a Dios por un nuevo día y una nueva oportunidad de vivir y apoyar y en las noches por igual dar las gracias al creador por un día más por volver a descansar”.
¿Cuál es la pasión de Reyna Dagda, aparte de la política?
Los caballos, amo la nobleza de los animales, el equipo que hacen con el jinete, su relación con la naturaleza, y me dedico también a ellos, ellos representan un complemento esencial de mi vida, cabalgar por Tepeji y sus alrededores con mi familia es simplemente maravilloso.